6/7/08

Adorar la píldora


Buena para los achaques, siempre los fármacos han estimulado la imaginación de no sólo quiénes los consumen, si no de aquellos interesados en saber todo lo que se refiera a la actividad mental. Desde que aparece el hombre, desde que observa y aprende de la naturaleza no sólo a alimentarse si no también a aprovechar sus frutos de distintas maneras, como para satisfacer necesidades propias del espíritu, ya hubo una admiración que se trasladaría con el paso del tiempo desde los dioses que habitaban en las plantas y los animales a las imágenes y el culto a las drogas de diseño.



Sin el afán de recaer en una oda a la cultura del éxtasis, sugiero la semejanza entre la alegórica belleza de los "hongos venenosos" como la amanita muscaria u "hongo matamoscas", de tallo blanco y sombrero rojo brillante con puntos rojos, y la brillantes de las píldoras que tomamos a diario y que se pueden encontrar en las farmacias cuando se quiere aliviar un dolor, inducir el sueño o sentirse con más vigor durante las mañanas.



Parto de lo natural, de la belleza que se encuentra en la naturaleza y que no sólo es aparente pues atesora una incalculable riqueza sensual, para llegar a la síntesis, a la graciosa e hipnótica belleza de los químicos, vistos éstos como objetos, como obras de arte. La estética generada por las drogas, que inclusive se llegaron a coleccionar como en el caso de una pastilla de éxtasis aparecida a principios de los noventa, de una edición muy limitada y que traía la cara de Gorbachov, ha hecho que sean los fármacos un símbolo y también un recordatorio, un souvenir de la historia de la humanidad.



Entonces la búsqueda del bienestar, de la felicidad, del éxtasis, de la salud en buena cuenta ha trastocado los parámetros en los que se ubican (consultorios, farmacias) para ser adorados, tanto en la estética de las artes visuales como se da en los conciertos del cuarteto alemán Kraftwerk, como en el negocio de las drogas, sean éstas pastillas de éxtasis traidas de Amsterdam, hierba de cultivo interior de Estados Unidos u hongos cosechados de la Universidad Agraria de La Molina.

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